Los bufones incomodan, exageran y parodian… pero no solo hacia afuera. También señala las grietas internas, los autoengaños y aquello en nosotros que preferimos no mirar.
En este módulo exploramos al bufón fuerza interna que actúa como espejo distorsionado: muestra las tensiones de la comunidad y revela los síntomas de los propios desequilibrios. Desde su territorio ambiguo —vulnerable, grotesco, agudo y lúcido— trabajaremos la risa, la incomodidad y la fisura como puertas hacia una expresividad honesta y radical.
Es un espacio para habitar lo incómodo, tocar la herida, y descubrir cómo lo ridículo puede abrir nuevas vías de creatividad, presencia y transformación.
La propuesta combina prácticas físicas, vocales, expresivas y performativas para activar el principio del bufón en el cuerpo, la voz y diferentes modalidades expresivas:
exploraciones físicas y vocales para encontrar deformaciones, ritmos torcidos y musicalidad bufonesca
ejercicios de activación imaginal para conectar con la energía ambigua, escurridiza y provocadora del bufón.
Trabajo de dibujo intuitivo y espacios para la exploración desde las artes plástica
escritura desde lo marginal, lo excesivo, lo tabú y lo grotesco
dinámicas para descubrir la figura colectiva del bufón como cuerpo grupal:
El enfoque busca abrir territorios de expresión, liberar tensiones y explorar lo ridículo, lo incómodo y lo profundo, más que generar resultados escénicos tradicionales.
A personas que hayan realizado el Módulo 1: Embaucadores – el arte de torcer el camino.
Intérpretes, creadores escénicos, performers y personas interesadas en explorar la imaginación a través del cuerpo, la máscara y el humor deformado.
No se requiere experiencia previa: solo curiosidad, disposición a jugar con lo grotesco y entrar en zonas incómodas, con ganas de reírse también de uno mismo.
El trabajo se apoya en la tradición del teatro gestual y de máscaras vinculada a la pedagogía de Jacques Lecoq, donde la deformación, la exageración y la fisura se entienden como herramientas de conocimiento y juego. Dialoga con la psicología profunda, viendo al bufón como síntoma interno y espejo colectivo, y se inspira en metodologías del Thomas Prattki Center de creación encarnada que conectan cuerpo, máscara y poética imaginal.
17 y 18 de Enero
De 10:00 a 19:00 horas
Módulo 1 y 2: 180 Euros
Consulta los precios para el ciclo completo
Descuento Early bird (hasta el 20 de diciembre): 10% en todas las modalidades
Escribe a salalacuadra@gmail.com
Requisitos: ropa cómoda, papel y bolígrafo.
Carlos Cegarra es artista escénico, pedagogo de movimiento y facilitador de procesos creativos. Formado en la London International School of Performing Arts (Londres), ha profundizado en disciplinas como el teatro físico y gestual, el juego teatral, la máscara ritual y pedagógica, y las intersecciones entre el teatro, la danza y las técnicas somáticas.
Su recorrido como docente incluye el Máster en Danza y Artes del Movimiento de la UCAM (Murcia), la Diplomatura de Máscaras de la Universidad de San Martín (Buenos Aires), el IFTS del a Thrissur School of Drama (Kerala, India), Cabuia –escuela de teatro y movimiento (Buenos Aires) y la facultad de traducción de la Universidad Lingüística Estatal de Moscú (Rusia).
Actualmente forma parte del equipo pedagógico de arthaus.berlin/Thomas Prattki Centre y su trabajo se orienta hacia la integración de cuerpo, imaginación y creatividad desde una mirada iniciática.
Desde hace unos años dirige La Cuadra, un centro de arte en el medio rural junto al Mar Menor que ofrece una propuesta centrada en lo pedagógico, lo colectivo y lo transformador. Este enfoque busca ofrecer una experiencia encarnada, lúdica, conectada con lo personal y lo relacional.
Es también fundador y director de la compañía Enkidu Teatro.